Carta al Ministro de Salud, Jaime Mañalich

Estimado Doctor Mañalich:

En el entendido de que usted, como Ministro de Salud y médico, busca siempre el bien común de los enfermos, debo señalar que al escuchar algunas de sus intervenciones, y leer las propuestas del Gobierno, me nacen  dudas que desearía las respondiera y explicara por esta vía ya que, lamentablemente, la solicitud de reunión por Ley de Lobby que he solicitado, a poco de usted asumir, se me ha rechazado.

a) ¿Es partidario usted de la importación de fármacos por parte de los enfermos en forma directa o a través de cualquier vía, incluyendo en esta última oficinas “gestoras de importación”, sin autorización sanitaria de funcionamiento, por ende sin Químico Farmacéutico responsable ni personal auxiliar de farmacia?

b) ¿Está usted de acuerdo con el aporte que representa el recetario magistral y en tal caso, de una vez por todas, modificar el proteccionista decreto 79/2010, tal como lo solicitó la honorable Cámara de Diputados por votación unámine y transversal, hace ya más de 3 años, sin que a la fecha ni el anterior, ni el actual Gobierno hayan tomado en consideración lo solicitado por la Cámara de Diputados?

Desde siempre el recetario magistral, base de la profesión del Químico Farmacéutico, ha sido un excelente apoyo para la elaboración de preparados magistrales de:

• Medicamentos no disponibles en plaza.

• Aquellos considerados como huérfanos, en los cuales los laboratorios no poseen interés de registrarlos en Chile.

• Preparados magistrales de fármacos orales, dérmicos, entre otros, cuyos elevados precios los hacen inaccesibles para nuestros enfermos. Está comprobado que vía recetario magistral es factible rebajar, para cientos de medicamentos, sus precios en diez y más veces.

• En recetario magistral es factible elaborar dosis a la medida de cada enfermo y también sin excipientes (tales como Lactosa).

• Hoy hay muy pocos principios activos puros en plaza, quedando aproximadamente un 45% de la población de enfermos que se estima sufriría de intolerancia sin protección.

c) ¿Está usted como médico de acuerdo con la venta de medicamentos de venta directa fuera de las farmacias, sea en Pronto Copec, Supermercados, o almacenes?

Entre algunos de los argumentos del Gobierno a favor de esta propuesta, se indica que hoy en farmacias se podrían adquirir en volúmenes todos los fármacos de venta directa que, entre paréntesis, son los de más bajo precio en el país. Entendiendo que esto no sería lo ideal.

¿Cómo es que entonces algo malo, posible de regular con una buena fiscalización sanitaria, se pretenda modificar por definitivamente un libertinaje y mal mayor para nuestros enfermos?

d) Finalmente, señor Ministro, usted siempre ha criticado los elevados precios de los fármacos que comercializan las farmacéuticas internacionales, quienes cobran hasta diez veces más en Chile por sus medicamentos respecto a lo que cobran por los mismos, por ejemplo, en Europa.

Sin embargo, aún así, todavía no se derriban las barreras sanitarias que existen para que ingresen al país fármacos bioequivalentes de países con estándares de calidad igual o superiores a Chile.

Me refiero a países como, China, Corea del Sur, India, Malasia, Rusia, Singapur, Taiwán, entre otros.

¿Es que acaso nuestro Ministerio de Salud, por ser agencia sanitaria de nivel 4, se considera superior a los países indicados?

Hace algún tiempo hemos consultado por OIRS al ISP sobre cuántos centros de bioequivalencia contaban en Chile con aprobación de la EMA o FDA. 

Su respuesta ha sido “lo desconocemos”. La realidad es que ninguno, por lo cual creo que poner en duda las resoluciones sanitarias de las agencias nacionales de medicamentos antes señaladas, me parece por decir lo mínimo improcedente.

Si usted, como Ministro de Salud, derriba las barreras implementadas en la norma técnica 131/2012, tenga la absoluta seguridad de que en corto plazo nuestro país contará con un gran arsenal de fármacos de excelente calidad y bioequivalentes baratos procedentes de estos países.