Estimado Director:
La Cámara de la Innovación Farmacéutica (CIF) que agrupa a las farmacéuticas establecidas en Chile hace gárgaras de ética y buenas prácticas. Se desmarcan y proponen sanciones drásticas para los laboratorios, Biosano, Fresenius y Sanderson, quienes se coludieron durante años para defraudar al Estado con sus precios para los medicamentos que elaboran y distribuyen en Chile, en un inserto pagado a página completa en el Diario El Mercurio (foto a pie de página).
Me pregunto, ¿cuál debiese ser la sanción para aquellos laboratorios que, sin necesidad de coludirse en el país, nos cobran desde un 50% y hasta 500 o 1000% más, respecto a lo que estas mismas empresas venden sus fármacos en la comunidad europea o países vecinos a ésta?. Ni siquiera me refiero a países como China o India. Sugiero les condenen a cadena perpetua, por los cientos de miles de enfermos que ellos han condenado a muerte al no permitir con sus elevados precios que estos accediesen a sus tratamientos. Este hecho lo vienen desarrollando desde siempre. Llevo más de 45 años conociendo este mercado y ya abusaban en ese entonces.
Por último, debo expresar que Fresenius/Sanderson es una empresa farmacéutica multinacional no inscrita en la CIF. ¿La Cámara de la Innovación farmacéutica hubiese expresado lo mismo si Fresenius/Sanderson estuviese afiliada a su organización?.
