El reconocido Grupo Farmacéutico de la Unión Europea declara que la regulación de la distribución de productos farmacéuticos es uno de los medios más efectivos para racionalizar el acceso a los medicamentos, garantizar la seguridad de los pacientes y proteger la salud pública. Por ello, advierte los riesgos de permitir su venta en supermercados u otros canales de distribución.
«Los productos farmacéuticos son productos muy especiales, debido a sus efectos terapéuticos, su papel vital para Salud de las personas y debido a los riesgos inherentes a su uso y posible uso indebido», señala en su paper.
Indica que «los farmacéuticos tienen la obligación legal de garantizar que el medicamento sea adecuado para el paciente antes de dispensarlo y reportar cualquier reacción adversa a las autoridades competentes (farmacovigilancia). Estas reglas no se aplican en la mayoría de los casos a los canales de distribución no farmacéuticos».
Sobre expectativas iniciales de la desregulación de los canales de distribución para medicamentos sin receta en Europa comenta que «eran aumentar accesibilidad y reducir los precios debido al aumento de la competencia. Sin embargo, no hay ninguna evidencia que haga concluir que esta medida sirva para ello o que se haya logrado en la práctica».
PGEU considera que la seguridad del paciente y la calidad de los servicios debe ser priorizada sobre cualquier otro objetivo político en las reformas que afectan la distribución de productos farmacéuticos. Lea el Paper completo en el siguiente link:
Declaración de grupo Farmacéutico de la Unión Europea (PGEU) efectos de la desregulación de la venta de medicamentos.